En 1989 se publicó en la editorial Anagrama el libro de relatos Galería de enormidades, del excelente escritor barcelonés Pedro Zarraluki. Hace poco tiempo adquirí esta joyita en una tienda de libros antiguos, de esas que todavía abundan por la capital y no cierran ni con las crisis. Se agradece que aún haya este tipo de comercios en las grandes ciudades.
Aunque Pedro Zarraluki se maneja como pez en el agua en el género del relato, ha dedicado buena parte de su vida a la producción novelística, obteniendo con ella diferentes galardones. Ha ganado el Premio Ciudad de Barcelona con la novela El responsable de las ranas (1990), el Premio Herralde de Novela con La historia del silencio (1994) y el Premio Nadal con Un encargo difícil (2005). Recientemente ha publicado en Destino la novela, bastante recomendable, Todo eso que tanto nos gusta (2008).
Entre sus libros de cuentos más celebrados se encuentra Galería de enormidades, compuesta por diecisiete breves relatos que dibujan alegremente un paseo lleno de humor por las anécdotas de la vida urbana con el convencimiento de que, tal como todo buen poema es en gran medida obsceno, toda buena anécdota resulta siempre escandalosa. Todas las pequeñas historias que cuenta Zarraluki en su particular galería son acaparadoras del interés del lector, pero hay una de ellas que sobresale por encima del resto. Se trata de "El ladrón neorrealista", un cuento que escribió Zarraluki tras encontrar la anécdota del robo del banco en una nota en la prensa, que recoge tal cual en su historia, con la particularidad de que el protagonista real lo leerá con gran entusiasmo: "Por desgracia lo hizo en la cárcel -nos revela el autor-, con lo que pone en entredicho los finales felices de la literatura".
Un libro que merece la pena recordar, aunque sólo sea desde este blog. Es una auténtica delicia leerlo. Acercaos a él en cuanto podáis.
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